“Happy”

Gustavo Suárez Ojeda

Alfredo aparece en escena, sube las escaleras del moderno departamento al que lo han invitado, trae la ropa empapada, un cafre al volante lo ha mojado, pasando a velocidad intempestiva sobre un charco, eso no le importa, él es feliz, esa nimiedad a cualquiera le puede pasar, lo recibe la pareja de uno de sus mejores amigos, en toalla, se acaba de bañar, lo invita a quitarse la ropa para ponerla a secar, le presta unos pantalones deportivos, así se queda esperando a su esposa y a su amigo, hace tiempo que la pareja de Alfredo y Melinda no tienen una noche libre, ésta no ha empezado del todo normal.